Desde que Caín quiso adorar a Dios en sus propios términos, por el Gran Diluvio, la Torre de Babel y el tiempo de los Jueces el hombre ha mantenido una apariencia y a eso se le podría decir es lo que llamamos “religión”. Debido a ello miles de persona que se sientan en muchas iglesias cristianas pasarán los años de la tribulación. La religión es una anestesia espiritual. Nos pone a dormir haciéndonos sentir que estamos bien.
Condenación de la gran ramera
1 [a] Vino uno de los siete ángeles que tenían las siete copas y habló conmigo, diciendo: «Ven acá y te mostraré la sentencia contra la gran ramera,[b] la que está sentada sobre muchas aguas.[c]
En la Biblia se menciona a Babilonia 287 veces, más que otra ciudad, con la excepción de Jerusalén. Este capítulo simbólicamente toma a Babilonia como un sistema religioso falso. La ramera es el símbolo religioso de Babilonia, una imagen que frecuentemente vemos en le Antiguo Testamento, donde se relaciona a judíos que profesaban adorar a Dios pero que realmente alababan a falsos dioses. A eso se le llama fornicacion espiritual.
El capítulo habla sobre dos mujeres (rameras) claramente simbólicas. La primera eclesiástica, espiritual y que controla muchas aguas que veremos más adelante representan las naciones de gentiles, literalmente multitudes en el planeta.
En los últimos días el sistema religioso se proclamará ser de carácter cristiano. Sus seguidores pensarán que Irán al cielo. Pero en realidad solamente siguen a Dios por nombre. Veamos como se comporta esta ramera:
2 Con ella han fornicado los reyes de la tierra, y los habitantes de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación».[d]
Jeremías 51:7
7 Una copa de oro que embriagó a toda la tierra
fue Babilonia en la mano de Jehová.
De su vino bebieron los pueblos;
se aturdieron las naciones.
Traicionaron la confianza dada a ellos por Dios para el cuidado de la gente al abrazar lo que la ramera representa. Es un retrato vivo de cómo el mundo y la iglesia se acuestan para fornicar. El propósito de la iglesia es estar separada del mundo, no el de estar incorporada a él. Hay que apartarse de la contaminación de la religión. Este tipo de relación es un adulterio espiritual. Hay que tener cuidado de la influencia global de las religiones más grandes del mundo: El catolicismo, la más rica del mundo y el Islamismo, la más creciente. En los últimos días estas dos religiones se unirán bajo una gran orden bajo la autoridad del Anti-Cristo. Recuerden cuando el Papa Juan Pablo II oró-rezó junto con Judíos, Budistas, Judíos. ¿Qué es lo que un representante de una denominación cristiana está haciendo al orar con otras religiones opuestas a Jesús? El Papa dijo que estaba desatando energías profundamente espirituales en el mundo para traer un nuevo clima de paz. Y además declaró que la iglesia católica intenta compartir y promover una cooperación ecuménica entre las religiones.
Una prestigiosa revista católica en Estados Unidos dijo que tal cooperación no será fácil de conseguirse, pero el día vendrá cuando “el amor y compasión, tanto de Buda como de Cristo sea predicado elocuentemente uniendo al mundo en un esfuerzo común para salvarlo de una destrucción sin sentido hacia una luz que todos creemos”.
¿Cómo es posible que una religión que profesa universalmente su amor por Jesucristo pueda estar de acuerdo lo que un budista pueda creer? Este es un territorio muy peligroso. Imagínense el rostro de Juan.
3 Me llevó en el Espíritu[e] al desierto,[f] y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos.
La bestia, la misma de Apocalipsis 13.1, con sus siete cabezas y diez cuernos, parece simbolizar al imperio romano y su religión pagana; la mujer, a la ciudad de Roma. Los nombres de blasfemia pueden ser los títulos divinos dados a los emperadores romanos. Aparece aquí un contraste simétrico: la bestia es una imitación diabólica del Cordero (Anti-Cristo) y la ramera, que corresponde a la ciudad pagana, es a su vez una imitación grotesca de la esposa del Cordero.
4 La mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, adornada de oro, piedras preciosas y perlas,[g] y tenía en la mano un cáliz de oro[h] lleno de abominaciones y de la inmundicia de su fornicación.
Cada humano se convierte similar al dios que venera. La Biblia nos dice cómo debe vestirse la mujer virtuosa. Aquí esta demostrado lo contrario.
5 En su frente tenía un nombre escrito, un misterio: «Babilonia[i] la grande, la madre de las rameras y de las abominaciones de la tierra».
Las prostitutas en Roma tenían una forma de venda sobre sus frentes con su nombre grabado en ellas, anunciando con orgullo lo que ellas hacían para ganarse la vida. A pesar de lo glamoroso de su vestimenta hacia el mundo no deja de ser una prostituta.
Babilonia es un símbolo del mal. En los tiempos de Juan, esa ciudad era Roma. La ciudad enemiga de Dios y de su pueblo. ¿Cuáles ciudades actualmente son como Babilonia o Roma?
6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos y de la sangre de los mártires de Jesús.[j] Cuando la vi quedé asombrado con gran asombro.
En los días de Juan, Roma estuvo bebiendo de la sangre de los santos-cristianos.
7 El ángel me dijo: «¿Por qué te asombras? Yo te diré el misterio de la mujer y de la bestia que la lleva, la cual tiene siete cabezas y diez cuernos.
8 La bestia que has visto era y no es, y está para subir del abismo[k] e ir a perdición. Los habitantes de la tierra, aquellos cuyos nombres no están escritos en el libro de la vida[l] desde la fundación del mundo, se asombrarán viendo la bestia que era y no es, y será.[m]
Satanás es el que da su autoridad al Anti-Cristo. La fuente de su poder también será su destino final: el infierno. Y la de la prostituta y la de la bestia. Hay que recordar que los nombres de las personas que han sido engañados por los tres poderes malignos no serán encontrados en el Libro de la Vida. El camino a la salvación es estrecho y muy pocos lo encuentran. El camino a la destrucción es muy amplio muy transitado, congestionado.
9 »Esto, para la mente que tenga sabiduría:[n] Las siete cabezas son siete montes[o] sobre los cuales se sienta la mujer,[p]
Siete cabezas: Posible referencia a siete emperadores romanos o, más probablemente, a una larga serie de emperadores simbolizada por el número siete. Algunos intérpretes ven en los siete montes y las siete cabezas una serie de gobiernos o imperios, como en el caso de las cuatro bestias de Daniel 7.17: "Estas cuatro grandes bestias son cuatro reyes que se levantarán en la tierra”. De ser así, el número siete podría representar la totalidad de los poderes del mundo.
Se sienta la mujer: Probable alusión a Roma, conocida como la «ciudad de las siete colinas» por los siete montes sobre los que está fundada. Más adelante sabemos que la ciudad era bien conocida por Juan. El verbo
Roma también fue el lugar donde el mundo “se casó con la iglesia”. El año 313 DC., fue cuando la iglesia católica se convirtió en la religión oficial del mundo, cuando Constantino la declaro como la religión oficial, más por una aventura política que un comentario de fe sobre una relación con Jesucristo.
10 y son siete reyes. Cinco de ellos han caído; uno es y el otro aún no ha venido, y cuando venga deberá durar breve tiempo.
Al tiempo en que Juan recibió esta visión, habían existido cinco imperios. Egipto, Asiría, Babilonia, Persia y Grecia. El imperio reinante era Roma.
11 La bestia que era y no es, es también el octavo, y es uno de los siete y va a la perdición.[q]
Las características del lenguaje simbólico no permiten identificar con certeza a estos reyes. Pero tiene las características de ser la bestia del Anti-Cristo.
12 Los diez cuernos que has visto son diez reyes[r] que aún no han recibido reino; pero recibirán autoridad como reyes por una hora, juntamente con la bestia.
La corta duración (por una hora) simboliza lo perecedero de los poderes que se oponen al Cordero.
Sobre los reyes hay que leer Daniel 2:36-45
36 »Este es el sueño. También la interpretación de él diremos en presencia del rey.
37 Tú, rey, eres rey de reyes; porque el Dios del cielo te ha dado reino, poder, fuerza y majestad.
38 Dondequiera que habitan hijos de hombres, bestias del campo y aves del cielo, él los ha entregado en tus manos, y te ha dado el dominio sobre todo. Tú eres aquella cabeza de oro.
39 Después de ti se levantará otro reino, inferior al tuyo; y luego un tercer reino de bronce, el cual dominará sobre toda la tierra.
40 Y el cuarto reino será fuerte como el hierro; y como el hierro desmenuza y rompe todas las cosas, así él lo desmenuzará y lo quebrantará todo.
41 »Lo que viste de los pies y los dedos, en parte de barro cocido de alfarero y en parte de hierro, será un reino dividido; pero habrá en él algo de la fuerza del hierro, así como viste el hierro mezclado con barro cocido.
42 Y por ser los dedos de los pies en parte de hierro y en parte de barro cocido, este reino será en parte fuerte y en parte frágil.
43 Así como viste el hierro mezclado con barro, así se mezclarán por medio de alianzas humanas; pero no se unirán el uno con el otro, como el hierro no se mezcla con el barro.
44 En los días de estos reyes, el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre,
45 de la manera que viste que del monte se desprendió una piedra sin que la cortara mano alguna, la cual desmenuzó el hierro, el bronce, el barro, la plata y el oro. El gran Dios ha mostrado al rey lo que ha de acontecer en lo por venir; y el sueño es verdadero, y fiel su interpretación».
13 Estos tienen un mismo propósito: entregarán su poder y autoridad a la bestia. :
Ver Daniel 9:27
27 Por otra semana más confirmará el pacto con muchos;
a la mitad de la semana
hará cesar el sacrificio y la ofrenda.
Después, con la muchedumbre de las abominaciones,
vendrá el desolador, hasta que venga la consumación
y lo que está determinado
se derrame sobre el desolador"».
Como ya lo hemos estudiado, la bestia se presentará como Dios y exigirá ser alabado por Israel. Muchos judíos se rehusarán, al igual de muchos recién convertidos en cristianos que se rehusarán adorarla. Muchos perderán la vida en su intento por sobrevivir. La bestia es la séptima y la octava el reino, que es una alianza de una nueva Roma es decir un imperio revivido. Un nuevo poder insano.
14 Pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá,[s] porque es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con él son llamados, elegidos y fieles».[t]
Ya falta poco para el regreso de Jesús.
15 También me dijo: «Las aguas que has visto, donde se sienta la ramera, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.[u]
16 Y los diez cuernos que viste, y la bestia, aborrecerán a la ramera, la dejarán desolada y desnuda, devorarán sus carnes y la quemarán con fuego.[v]
Su vestimenta glamorosa y sus joyas no le van a servir de nada. Al destruirla, no habrá necesidad de que exista la religión. Ya no sirve para nada.
17 Dios ha puesto en sus corazones el ejecutar lo que él quiso: ponerse de acuerdo y dar su reino a la bestia hasta que se hayan cumplido las palabras de Dios.
Es una justicia poética. El plan de Dios lo cumplen sus enemigos.
18 Y la mujer que has visto es la gran ciudad que reina sobre los reyes de la tierra».[w]
A fines del siglo I DC., esta descripción solo podía aplicarse a la Roma imperial, que, como la Babilonia del Antiguo Testamento, se había convertido en prototipo de todo poder humano enemigo de Dios.
Pero también se ve como la representante de la falsa religión.
Jesús nos advierte del destino de la humanidad.
Lucas 21:32:36
32 »De cierto os digo que no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca.
33 El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.
34 »Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de glotonería y de embriaguez y de las preocupaciones de esta vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día,
35 porque como un lazo vendrá sobre todos los que habitan sobre la faz de la tierra.
36 Velad, pues, orando en todo tiempo que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del hombre».
Footnotes:
- Apocalipsis 17:1 17.1--20.15 En la sexta sección del libro, en una serie de visiones sucesivas, se describe el juicio de Dios sobre las potencias humanas enemigas suyas representadas por Babilonia, símbolo del imperio romano, y sobre Satanás, el archienemigo que está detrás de aquellas potencias.
- Apocalipsis 17:1 La gran ramera
- Apocalipsis 17:1 Sentada sobre muchas aguas: Cf. v. 15; la imagen ha sido tomada de Jer 51.13.
- Apocalipsis 17:2 Fornicación: Jer 51.7; véase Ap 14.8 nota j.
- Apocalipsis 17:3 Me llevó en el Espíritu: otra posible traducción: en éxtasis (véase Ap 1.10 nota v).
- Apocalipsis 17:3 La bestia, la misma de Ap 13.1, con sus siete cabezas y diez cuernos, parece simbolizar al imperio romano y su religión pagana; la mujer, a la ciudad de Roma. Los nombres de blasfemia pueden ser los títulos divinos dados a los emperadores romanos. Aparece aquí un contraste simétrico: la bestia es una imitación diabólica del Cordero (véase Ap 13.1-2 n.), y la ramera, que corresponde a la ciudad pagana, es a su vez una imitación grotesca de la esposa del Cordero (véase Ap 19.7-8 n.).
- Apocalipsis 17:4 Ap 18.16.
- Apocalipsis 17:4 Cáliz de oro: Cf. Jer 51.7.
- Apocalipsis 17:5 Babilonia: Véase Ap 14.8 nota i.
- Apocalipsis 17:6 Ap 18.24. Alusión gráfica a la muerte de los cristianos perseguidos por el imperio romano.
- Apocalipsis 17:8 Abismo: Ap 11.7. Véase 9.1 nota b, y cf. 20.1-3.
- Apocalipsis 17:8 Libro de la vida: Véase Ap 3.5 nota f; cf. Ap 13.8.
- Apocalipsis 17:8 Que era y no es, y será: expresión que se contrapone a la aplicada a Dios en Ap 1.4,8; 4.8; véase 13.1-2 n., y que coincide con la descripción que se hace de la misma bestia en Ap 13.3.
- Apocalipsis 17:9 La mente que tenga sabiduría: véase Ap 13.10 nota l.
- Apocalipsis 17:9 Siete cabezas: Posible referencia a siete emperadores romanos o, más probablemente, a una larga serie de emperadores simbolizada por el número siete. Algunos intérpretes ven en los siete montes y las siete cabezas una serie de gobiernos o imperios, como en el caso de las cuatro bestias de Dn 7 (cf. Dn 7.17). De ser así, el número siete podría representar la totalidad de los poderes del mundo.
- Apocalipsis 17:9 Se sienta la mujer: Probable alusión a Roma, conocida como la «ciudad de las siete colinas» por los siete montes sobre los que estaba fundada (véase también 17.18 n.).
- Apocalipsis 17:11 Las características del lenguaje simbólico no permiten identificar con certeza a estos reyes.
- Apocalipsis 17:12 Cf. Dn 7.7,23-24. La corta duración (por una hora) simboliza lo perecedero de los poderes que se oponen al Cordero (v. 14).
- Apocalipsis 17:14 Ap 19.19-21.
- Apocalipsis 17:14 Ap 19.16; cf. Dt 10.17; Dn 2.47.
- Apocalipsis 17:15 Sobre esta imagen, véase 17.1 nota c.
- Apocalipsis 17:16 Cf. Ez 23.25-30; Os 2.3.
- Apocalipsis 17:18 A fines del siglo I d.C., esta descripción solo podía aplicarse a la Roma imperial, que, como la Babilonia del AT, se había convertido en prototipo de todo poder humano enemigo de Dios (véase Ap 14.8 nota i).
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