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martes, 5 de septiembre de 2017

Estudio del Libro de Romanos Capítulo 12


Estudio preparado por el Pastor Armando García ULCM

La mayoría de las cartas de Pablo fueron documentos ocasionales; por lo tanto, contienen tanto secciones doctrinales como de aplicación a la vida diaria. Pablo escribió la carta a los Romanos para tratar un problema o crisis porque llevaban una vida pecaminosa alejada de Dios. Además al tener creencias religiosas sin tener un estilo de vida recta, eso no proviene de Dios. Como ejemplo está lo dicho por Jesús en Mateo 7:24-27; de una casa cimentada en una roca. La casa fue azotada por las inclemencias del tiempo y no se derrumbó, pero aquella casa construida sobre la arena por una persona insensata o incrédula,  su casa, sí fue derrumbada por los vientos y las lluvias.
Leamos todo el Capítulo 12 de Romanos.
1 Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.
2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
3 Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno.
4 Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función,
5 así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros.
6 De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada, si el de profecía, úsese conforme a la medida de la fe;
7 o si de servicio, en servir; o el que enseña, en la enseñanza;
8 el que exhorta, en la exhortación; el que reparte, con liberalidad; el que preside, con solicitud; el que hace misericordia, con alegría.
9 El amor sea sin fingimiento. Aborreced lo malo, seguid lo bueno.
10 Amaos los unos a los otros con amor fraternal; en cuanto a honra, prefiriéndoos los unos a los otros.
11 En lo que requiere diligencia, no perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor;
12 gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración;
13 compartiendo para las necesidades de los santos; practicando la hospitalidad.
14 Bendecid a los que os persiguen; bendecid, y no maldigáis.
15 Gozaos con los que se gozan; llorad con los que lloran.
16 Unánimes entre vosotros; no altivos, sino asociándoos con los humildes. No seáis sabios en vuestra propia opinión.
17 No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres.
18 Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres.
19 No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor.
20 Así que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de beber; pues haciendo esto, ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza.
21 No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal.
Analicemos en Capítulo 12
Pablo empieza en este capítulo una serie de exhortaciones sobre las obligaciones fundamentales de un cristiano para el servicio recto y justo a Dios, primero les dice “os ruego” y después les habla “hermanos” como identificación propia de lo mismo que creen y que todos son hombres de Dios.
Los versículos 1-2 forman la base de una vida guiada por el Espíritu. Puesto que en nuestro corazón deseamos servir a Dios y no nos condena cuando fallamos ya que la vida cristiana empieza como un acto de misericordia de parte de Dios al costo de la vida de su hijo Jesús en la cruz.
Así que Pablo está presentando el acto de misericordia de Dios, demanda una extraordinaria respuesta, aquí el apóstol nos presenta una situación efectuada en el templo, presentando nuestros cuerpos como sacrificio vivo, piensen lógicamente, el sacrificio de Jesús es apropiado y así rendir nuestros cuerpos al servicio de Dios, cuando se refiere a un culto racional, ser templos vivientes ¿Que hacemos en el templo? Cantamos, oramos, leemos la palabra, entonces somos iglesias andantes, vivientes,  rindiendo  nuestras vidas a Él.
Los sacrificios vivos, se refiere a que tenemos que ser transformados, para ser ciudadanos celestiales y no terrenales. Por ejemplo: si usted quiere ser un ciudadano, aprende normas, sacrificios y privilegios del país donde reside, así es como Pablo ilustra un sacrificio vivo de transformación.
Pablo, utiliza el término ‘santo’ para aclarar su definición, significa “apartado para el servicio de Dios”. En éste contexto es la consagración del creyente y su disposición a ser utilizado por Dios para Sus propósitos.
Jesucristo es santo porque Él es de Dios y como Dios él es Santo y Justo. Jesucristo es santo porque Él es sin pecado. Porque Dios es santo, Sus hijos deben ser santos. Porque Jesucristo es santo Sus seguidores deben también ser santos. Los cristianos son salvos para servir en el espíritu y carácter de Cristo.
La ley del pecado y la muerte todavía está vigente, pero la nueva ley de vida en Cristo toma el lugar de la vieja ley. Los creyentes son exhortados a no continuar siendo como el sistema del mundo cambiante y pecador del cual aún son parte físicamente, y ser cambiados radicalmente a la imagen de Cristo, vivir una nueva era en el Espíritu.
En el versículo 2, Pablo dice “no os conforméis”, es un contraste con el versículo 1, que decía “os ruego”. El versículo 1 es algo que tenemos que hacer los cristianos al sacrificar nuestras vidas y el versículo 2, el conformismo es algo que no tenemos que hacer.
La palabra de Dios  nos dice que somos extranjeros de este mundo y que no nos conformemos a este siglo, el hombre por naturaleza se conforma a las cosas del mundo y servimos al príncipe de este mundo.
El libro bíblico de 1 de Juan nos habla de los deseos de la carne, en otras palabras no hay que dejarse que este mundo nos imponga su molde, tenemos que ser transformados para ser hijos de Dios y cuando Pablo dice renovación de nuestro entendimiento, es la renovación de nuestra mente, acompañada del Espíritu Santo. Así, que hay que dejar que la buena voluntad de Dios obre y reine en nosotros.
El cristianismo es diferente de la filosofía griega, la cual pensaba que el cuerpo físico era malo. El cuerpo es en verdad el área de la tentación, pero es moralmente neutral. El término "cuerpo" en el versículo 1 parece ser paralelo a mente o "entendimiento" en el versículo 2.
Los creyentes necesitan comprometer o entregar su ser entero o su persona completa a Dios así como anteriormente ellos se entregaron al pecado.
Pablo no está proponiendo aquí el alejarse de la sociedad, como un ermitaño, ni castigar el cuerpo con penitencias o mandas, ni el abstenerse de casarse viviendo en celibato, sino más bien está hablando de vivir vidas activas de servicio y de amor como lo hizo Cristo.
A partir del versículo 3 el apóstol empieza a hablar de los dones espirituales, que consisten en nuestra total rendición a Cristo resultando así en servicio a Dios y a los demás. Los dones espirituales enfatizan nuestra unidad en Cristo y nuestra diversidad en los dones. Los creyentes deben esforzarse en buscar la unidad, no la uniformidad. ¡Somos y estamos equipados por Dios para servirnos los unos a los otros!
Este versículo habla de la gracia de Dios ¿Qué es lo que es?, es algo que solo Dios nos puede dar, un favor inmerecido. vimos en el versículo 1 y 2 la exhortación de Pablo, tomando el rol de apóstol, por la autoridad para exhortarnos de instruirnos a nosotros.
Dios odia el orgullo y muchas veces somos muy orgullosos. La razón por la que Dios odia el orgullo, es porque fue la raíz de Satanás para la desobediencia. El orden para combatir el orgullo es que debemos vernos objetivamente, como Pablo nos dice en este versículo, “piense de sí con cordura” y esta exhortación va acompañada de Fe, como Dios repartió a cada uno, hay que reconocer que Dios nos da talentos y habilidades para servirle.
En Romanos hay un énfasis obvio de la "misericordia" de Dios al tratar con la humanidad pecadora. Debido a que la gracia y misericordia de Dios son ofrecidas gratuitamente, los creyentes deben vivir vidas en santidad por gratitud, no para hacer méritos.
Los seres humanos, o se entregan a Satanás, o se entregan a Dios. Así como Cristo se entregó únicamente a la voluntad de Dios, aún en crucifixión. Sus seguidores deben imitar Su vida entregada a Dios como forma de sacrificio de nuestros cuerpos.
Los creyentes viven en este tiempo lleno de tensión en el cual las edades han coincidido sorprendentemente. Debido a las dos venidas de Cristo; la de su nacimiento y crucifixión y la que pronto, algún día, regresará. Los creyentes viven en un tiempo de tensión de "ya casi, pero todavía no" del Reino de Dios como algo ya en el presente y sin embargo aún en el futuro.
Los profetas del Antiguo Testamento veían el futuro como una extensión del presente. Para ellos el futuro sería una restauración del Israel geográfico. Sin embargo, aun ellos veían la venida de un nuevo día. Con el continuo rechazo voluntario de Dios, por los descendientes de Abraham; aún después del Exilio, se desarrolló un nuevo paradigma en la literatura judía. Estos escritos empiezan a distinguir las dos edades o épocas: una edad presente dominada por Satanás, y una edad venidera de justicia dominada por el Espíritu que será inaugurada por Jesús.
En la teología del Nuevo Testamento estas dos edades judías han coincidido en el mismo punto del tiempo debido a las inesperadas e ignoradas predicciones de las dos llegadas del Mesías. La encarnación de Cristo cumplió las profecías del Antiguo Testamento en cuanto a la inauguración de la nueva era. Sin embargo, el Antiguo Testamento también describió Su llegada como Juez y Conquistador, más sin embargo El vino primero como un humilde siervo. Pero regresará con poder, así como lo predijo el Antiguo Testamento. Este cumplimiento en dos etapas causó que el reino de Dios fuera anunciado o inaugurado, pero todavía no consumado. Es la tensión del Nuevo Testamento del ¡ya casi, pero todavía no!
El versículo 4 se encuentra una metáfora común en los escritos de Pablo. La interdependencia del cuerpo humano donde describe los dones en la iglesia. El cristianismo es tanto individual como corporativo.
Si decimos que somos cristianos vamos a tomar parte de ese cuerpo, podemos comparar la iglesia con un cuerpo humano, Pablo hablo en el versículo 3 de la relación de un cristiano a otro. Ahora a partir del versículo 4; nos va hablar del compañerismo, que nos hace un cuerpo en cristo, así como Dios instituyo apóstoles, profetas, pastores, maestros, como Pablo lo explicó en Efesios 4:11-12.
Así, como el cuerpo humano tiene varios miembros no todos tienen la misma función, todos tenemos diferentes dones, 1 Corintios 12:29-30. Dios nos da de acuerdo a su voluntad, 1 de Corintios12:18-23. Con esto en mente, el cuerpo de Cristo, tiene que ver con la unidad, no hay razón para envidiar a otro hermano, porque tiene el don de cantar o de evangelizar, tú serás más bendecido si le sirves a lo que te ha llamado.
No solo componemos un cuerpo, sino que cada miembro nos pertenecemos entre sí, así que hay que considéranos unos a otros, para dar testimonio en la iglesia, cuando actuamos solos, hay desorden, división, envidia, conflictos, Hebreos 10:24-25, cuando todos estamos juntos, nos lleva la humildad, actividad de compañerismo y reforzamos nuestro caminar cristiano.


Versículo 5,  "nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo". Este versículo enfatiza tanto la unidad de los creyentes como la diversidad. Esta es la tensión de los dones espirituales dentro de la iglesia. ¡Los cristianos no están en competencia, sino en cooperación!
Aquí ilustra la comparación del compañerismo cristiano y el cuerpo humano, ahora si como cada miembro en el cuerpo tiene su función, como el corazón bombea la sangre, el pulmón bombea el oxígeno.
De esta forma, en la iglesia, es importante que seamos guiados por Espíritu Santo y buscar  muestra propia función como miembros del cuerpo de cristo, Dios nos ha puesto según su voluntad, 1 Corintios 1:18.
Con esto en mente el cuerpo de cristo es unidad, no hay razón para tener envidia debe estar usted contento con lo que Dios le ha dado, cuando alguien no es guiado por el Espíritu santo, daña al cuerpo, porque promueve desorden, si Dios ya le dio su don y no lo desarrolla como una función vital, ¿que pasara?, lea 1 de Corintios 12:17-18.
El objetivo y el propósito es saber que la cabeza del cuerpo es cristo, hay gente con diferente color de piel, nivel social, pero pueden ser unidos en un solo cuerpo, porque tenemos un Espíritu viviendo en nosotros.
Todos los miembros nos pertenecemos unos a otros, debemos aceptar el servirnos unos a otros, consideremos precioso y valioso nuestro compañerismo.
El versículo 6 habla de los dones, por lo que hay que recordar lo dicho en 1 de Corintios 12, ya varios versículos citados arriba. Hay muchos dones y un mismo espíritu y hay muchas maneras de servir, pero a un mismo Señor.  Hay que tomar en cuenta que la mente de la carne es muerte, la mente del Espíritu es vida y paz.
Así, que el don  que usted tiene  póngalo a trabajar para el engrandecimiento de la obra, tiene usted problemas de saber cuál es su don, bueno para eso tenemos pastores que nos deben ayudar a ver que don tiene usted.
Versículo 7. El espíritu de servicio. La iglesia primitiva vio a personas dotadas funcionando en maneras entrelazadas. Predicación, profecía, evangelización y enseñanza, todos comparten el evangelio, pero con diferentes énfasis y metodologías.
Tenemos diferentes dones dentro de la iglesia y son dados  por la gracia de Dios y no de acuerdo a nuestra ambición. Cualquier sea el don hay que hacerlo con amor.
El Señor nos utiliza  para ministrar a su pueblo como líderes conforme a su soberana voluntad, el liderazgo espiritual eficaz no viene como resultado del adiestramiento religioso ni con un título universitario en teología; sino viene por el llamado que el Señor hace a cada uno de nosotros.
Jesús dijo a sus discípulos no me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros (Juan 15: 16) la soberana elección por parte de Dios da gran confianza a los cristianos. Realmente podemos decir no estamos aquí por decisión de un individuo, ni por la elección de un grupo, sino por la omnipotente designación de Dios.                                                                                                                        
El versículo 8 habla de la " exhortación". Este término está relacionado a la enseñanza. Posiblemente es la habilidad por la cual la verdad es aplicada a la vida.
También podemos apreciar lo que Pablo enumera diferentes dones y como el Espíritu Santo los describe y cómo deben ser practicados
El de Profecía. Úsese conforme a la medida de la fe porque nos dice esto, porque había un abuso sobre esto, lean Deuteronomio 18:20-22
El de Servicio. Esto  tiene un gran impacto especialmente el servicio a otros. Dios da honor a estas personas.
El de Enseñanza. Interpretación y exposición de la palabra, maestros debemos buscar siempre la guía del Espíritu Santo.
El de Exhortación. Se tiene que apreciar las palabras de exhortación, esto es un valioso talento para que el pecador se arrepienta y reciba a Jesús como su Salvador.
El que Repartición. Algunos tienen el talento de hacer dinero,  siendo candidatos para cultivar ayuda financiera, pero esto no está limitado nada más al dinero, sino al servicio de tu tiempo.    
El que Liderazgo. Esto es por seguro un don de Dios, y es importante para la organización de la iglesia y sus ministerios, todo líder tiene un gran compromiso, miremos este ejemplo en Éxodo 18:25-26 apoyar al pastor. 
El de Misericordia. Cuando muestra misericordia hágalo con alegría, no  enojado por lo que tengo que hacer, ser sincero de corazón. Nuestro Dios es caracterizado por ser misericordioso.
Hay que buscar y aplicar estos dones, para traer almas a los pies del Señor, practíquelos con responsabilidad.
                           

El versículo 9 dice "El amor sea sin fingimiento". No andamos en la carne cuando le permitimos al Espíritu de Dios que habite en nuestro cuerpo. "Fingimiento" o "hipocresía" es un término teatral para "hablar detrás de una máscara." El amor a Dios no debe ser actuación ni falsificación. El amor a Dios es la característica de los creyentes porque es el carácter del Señor.
En los versículos anteriores hablamos de diferentes dones que Dios nos da al servirle a Él, ahora en estos versículos empieza una sección a la manera devota en como servirle.
Primero que nada un “amor sincero”, genuino, el que diferencia con otras personas, todos los que sirven a Dios tienen que hacerlo con amor a Dios y amar a su prójimo que nos dice Marcos 12:30-31
Es necesario que nuestro amor sea sincero al servir sin hipocresía, no debemos olvidar que el amor viene de Dios 1 de Juan 1:5-6 así que como resultado de este amor debemos ser luz para otros.
Pablo nos da 3 características sobre amor sincero:
1) aborreced  lo malo y seguir lo bueno el amor sincero no tolera lo malo, no se goza de   la injusticia más se goza de la verdad, cuántos de nosotros caemos cortos sobre esto.
2) amaos  los unos a los otros con amor fraternal -amor fileo- no temporalmente sino con fervor y devoción; pero cuantos de nosotros, perdemos la paciencia, persistir en devoción calmará la dureza de nuestro corazón, la palabra nos dice que amor es paciencia 1 de Corintios13.
3) honra, prefiriéndonos los unos a otros, la humildad es necesario para tener un sincero amor, nunca es  una carga, al contrario, es un gozo.  
Versículo 10 nos dice "Amaos los unos a los otros con amor fraternal". Este era un término griego compuesto (fileo + storge) combinando así "amor fraternal" o "amor de hermanos" con "amor de familia" y es usado solo en el Nuevo Testamento. Los cristianos son una familia. Se nos manda que nos amemos los unos a los otros.
El versículo 11 habla de “En lo que requiere diligencia, no perezosos". Esto podría referirse al espíritu humano regenerado o al Espíritu Santo habitando en el creyente.
Pablo nos exhorta a ser fervientes en Espíritu y sugiere profesionalismo, diligencia, ser como el hombre más dedicado o audaz para hacer negocios y es necesario que el Espíritu Santo nos guíe en  manera organizada.

Pablo exhorta gozosos en esperanza, ser felices al servir, nuestra esperanza no es del  mundo sino las  promesas eternas del Dios todo poderoso.
Ahora  cuando Pablo habla de sufrimiento en la tribulación él está hablando de mayores, no menores tribulaciones, debemos considerar la vida de Pablo, él fue capaz de escribir desde la prisión la carta de Filipenses.
Imagínese con todos los azotes y seguir clamando a Dios, Pablo nos dice ser constantes en oración, es fácil estar llenos de servicio y caer cortos al orar siempre hay que orar.
El versículo 13 nos dice que hay estar "compartiendo para las necesidades de los santos". El término compartir tiene una amplia gama de significados para Pablo. Incluye tanto compañerismo en el evangelio y en las necesidades físicas. Es aún usado para hablar de compartir los sufrimientos de Cristo y los de Pablo. El estar unido con Cristo significaba estar unido con Su pueblo ¡en todos los niveles!
El versículo 14 nos da una lección de vida: "Bendecid a los que os persiguen" sin maldecir. Orar y bendecir a nuestros enemigos
Primero que nada  Pablo implica que seremos perseguidos y nos exhorta a bendecir a los que nos persiguen. Timoteo 3:12 nos dice que todos los que quieran vivir piadosamente padecerán persecución.
Persecución viene en diferentes formas entre los hermanos, en tu familia, en tus hijos. Ver Mateo 10:36.  Tenemos que oír la exhortación de Pablo de bendecir a estas personas en oración. Jesús nos dice en Mateo 5:44  en vez de maldecirlos hay que bendecirlos.                                                                                      
En el versículo 15 se nos pide que: "Gozaos con los que se gozan; llorad con los que lloran”. Los cristianos son una familia. Los creyentes no están en competencia, deben tratarse los unos a los otros con amor de familia. Es aún posible que esto refleje la respuesta del creyente ante la comunidad inconversa usando las oportunidades culturales o las circunstancias como oportunidades evangelistas.
Pablo continua la exhortación que concierne a este mundo, y nos dice que apoyemos al hermano  en sus tristezas, alegrías, y debemos mostrar sensibilidad humana, como Cristo tuvo cuando vio a María llorar por su hermano muerto Juan 11:33-37.
Compadecerse es un punto muy importante en la vida de un cristiano,  porque es manifestación de amor al prójimo sintiéndolo de corazón.
                                                                                       

Como cristianos tenemos que entender que tenemos altas y bajas; así que hay que apoyarnos unos a otros con compañerismo.  
El versículo 16 puede ser visto en relación al conflicto entre (1) los creyentes judíos y los creyentes gentiles en la iglesia de Roma (2) el antiguo conflicto entre clases económicas; o (3) las diferencias entre los dones espirituales.
Los creyentes no deben actuar como si fueran superiores a otros, ni arrogantes ante la comunidad no creyente.
Los cristianos deben estar asociados con los humildes y no con los altivos. La primera parte de este versículo: unánimes entre vosotros, no altivos, literalmente Pablo dice que hay que ser del mismo pensamiento y hacer las cosas con un mismo común denominador, esto nos conduce a una actitud de armonía y paz.
Jesús siempre se relacionaba con gente humilde desde su niñez hasta su muerte se asoció con pecadores, carpinteros, pescadores, recolectores de impuestos, ladrones; etc., queremos seguir su ejemplo.
Otra lección de vida nos la dá el versículo 17. "No paguéis a nadie mal por mal". Esto significaba detener un acto ya en proceso. Depende de Dios poner las cosas en orden, no de los creyentes, “procurad lo bueno delante de todos los hombres”. Los creyentes viven con un ojo puesto en la evangelización de los no creyentes. No debemos hacer nada que ofenda o aparte a los inconversos. Aún nuestras más profundas convicciones deben de ser expresadas en amor.
Lo anterior es lograble, leyendo el versículo 18. "Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres". Esta no es siempre la elección del creyente, pero la gramática implica que sí es posible con frecuencia.
Una lección más nos la dá el versículo19. "No os venguéis vosotros mismos". Esto usualmente significa detener un acto ya en proceso. Dios pondrá las cosas en su lugar un día.
El versículo 20 dice "si tu enemigo tuviere" significaba acción futura en potencia. ¡Los enemigos vendrán! Además este versículo dice que las "ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza". Las teorías de interpretación de este pasaje son: Ascuas de fuego en la cabeza de alguien se refiere al hecho de que alguna gente cargaba ascuas en un contenedor y amigos les daban carbones encendidos. Era un acto de gracia. Era una expresión idiomática cultural posiblemente proveniente de Egipto la cual significaba que la bondad es la mejor manera de convertir a un enemigo en un amigo.
Y por último, el versículo el 21 dice "No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal". Nuestra respuesta al trato injusto determinará y reflejará el nivel de nuestra paz interior y de nuestro gozo. La amargura es un cáncer espiritual. Los creyentes deben entregárselo todo a Dios.
En conclusión: Que nos presentemos en sacrificio vivo a Dios y que no nos conformemos a este mundo sino permitir ser transformados y solamente se consigue viene por el conocimiento de la palabra de Dios.

No se pierda el estudio del Capítulo 13 de Romanos, preparado por el Pastor Armando García ULCM, donde aprenderemos a obedecer y orar por nuestras autoridades.              



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